Rusia ataca mientras Ucrania canjea prisioneros de guerra.
Kiev fue atacada por segunda noche consecutiva con drones y misiles, según informaron autoridades ucranianas el domingo.
Las fuerzas de defensa aérea actuaron ante la presencia de más de una docena de drones en el espacio aéreo de la capital.
Parte de los escombros impactaron un edificio de cinco pisos en el distrito de Golosivsky.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, pidió a los ciudadanos buscar refugio tras reportarse explosiones en varios puntos de la ciudad.
Las regiones de Mykolaiv y Jersón también registraron ataques nocturnos.
En Moscú, las autoridades rusas indicaron que interceptaron varios drones y restringieron operaciones en al menos cuatro aeropuertos, incluido el de Sheremétievo.
De acuerdo con el Ejército ucraniano, durante el fin de semana se interceptaron seis misiles Iskander y 245 drones Shahed en territorio ucraniano.
La policía reportó al menos 15 personas heridas en Kiev y otras dos en áreas cercanas. El Ministerio de Defensa ruso aseguró haber atacado infraestructuras militares y sistemas antiaéreos en Ucrania.
Mientras continuaban los ataques, Rusia y Ucrania llevaron a cabo la segunda etapa del mayor canje de prisioneros desde 2022.
Fueron intercambiados 307 combatientes de cada lado.
El día anterior, otras 270 personas y 120 civiles de cada bando también fueron liberadas. Este proceso forma parte de los acuerdos alcanzados durante conversaciones realizadas en Estambul.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó que el conflicto no cesará “hasta que Moscú enfrente sanciones más severas”.
Además, reiteró que su país está dispuesto a buscar soluciones diplomáticas que garanticen seguridad, mientras acusó al gobierno ruso de “no mostrar disposición” para avanzar.
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