El Ayuntamiento de Jerez reconoció que el sitio de disposición final de residuos sólidos urbanos del municipio no cumple con la Norma Oficial Mexicana NOM-083-SEMARNAT-2003 y opera, en los hechos, como un tiradero a cielo abierto, al carecer de la infraestructura mínima para el manejo adecuado de residuos.
El 1 de abril de 2025, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) determinó que el basurero municipal incumple la normativa ambiental vigente, al no contar con sistemas para el control de lixiviados ni de biogás, por lo que impuso una multa de 147 mil 082 pesos y ordenó la clausura temporal del sitio. En ese momento, la autoridad ambiental otorgó plazos de entre 30 y 60 días para que el municipio corrigiera las irregularidades detectadas; no obstante, el Ayuntamiento optó por impugnar la sanción mediante un juicio de nulidad.
Las observaciones de la Profepa coinciden con lo señalado por el propio gobierno municipal en un informe técnico elaborado por la Dirección de Obras y Servicios Públicos, en el que se reconoce que el lugar “no puede considerarse un relleno sanitario”. El documento señala que el basurero tiene más de 40 años de operación y ha superado su vida útil, presentando una evidente saturación, con residuos depositados directamente sobre el suelo, sin celdas ni barreras de protección.
El sitio carece de sistemas de impermeabilización, como capas de arcilla compactada o geomembranas, lo que permite la filtración de lixiviados y representa un riesgo potencial de contaminación del suelo y de los mantos freáticos. A ello se suma la ausencia de infraestructura para la captación y control de biogás, como chimeneas o tuberías, lo que favorece la acumulación de metano y otros gases asociados a riesgos ambientales y de seguridad.
Asimismo, no existen manuales de operación, programas de monitoreo ambiental ni estudios hidrogeológicos que permitan evaluar el impacto del basurero en su entorno, pese a que diariamente recibe alrededor de 60 toneladas de residuos.
El director de Obras y Servicios Públicos de Jerez, Rubén Dávila Aguilar, reconoció recientemente que el sitio se encuentra rebasado en su operación. Sin embargo, evitó precisar las acciones concretas que el Ayuntamiento ha emprendido para atender las recomendaciones de la Profepa. Indicó que la multa no ha sido pagada y que los plazos se han extendido, sin detallar que existe un juicio de nulidad en curso contra la resolución de la autoridad ambiental.
El funcionario señaló que se analizan dos o tres proyectos para habilitar un nuevo sitio de disposición final y que, de manera provisional, se continúa operando con apoyo de maquinaria para el manejo de los residuos.
A nivel estatal, la Secretaría de Agua y Medio Ambiente ha advertido que 45 de los 58 municipios de Zacatecas operan tiraderos a cielo abierto sin cumplir con la NOM-083, situación atribuida a la falta de recursos, la limitada inversión municipal y la escasez de terrenos aptos para rellenos sanitarios. En este contexto, autoridades ambientales federales han señalado que muchos basureros fueron ubicados históricamente sin criterios técnicos y han planteado alternativas como la producción de composta, considerando que una parte significativa de los residuos generados en la entidad es de origen orgánico.
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